Esta historia va dedicada a todos los fans de Xena pero en especial a Psico y Rogue quienes me impulsaron a continuar este fic.
Pues espero que lo disfruten y si quieren opinar y sugerirme algo pueden hacerlo escribiendo al siguiente e-mail:
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INSTINTO
Por: Marína Pérez
Esto sucede después de que Xena viaja a la tierra amazona de los muertos para reencontrarse con Gabrielle.
Al abrir los ojos Xena intenta encontrar el rostro de su querida amiga, empieza un nuevo día sin Gabrielle y la desesperación nubla sus pensamientos esta a punto de perder todas sus esperanzas, solo vive con su recuerdo, sin comer bocado parte con Argos sin rumbo su mente esta en un caos total ahora no le importan los demás solo quiere recuperar a su amiga a como de lugar.
Mientras Gabrielle enfrenta sus propios demonios, la consumen fiebres y delirios, no sabe cuanto tiempo ha pasado desde la ultima vez que vio a Xena, en todas sus alucinaciones aparece la guerrera siempre con esos ojos azules que penetran el alma con esa mirada tan maravillosa que la intimidaba y estremecía, la bardo se pregunta si volverá a verla, de pronto los recuerdos se apoderan de su mente y la trasladan con su compañera...
Entre tanto la guerrera camina solitaria, de pronto se da cuenta que alguien la sigue inmediatamente se pone en guardia y sale de los arbustos Joxer quien aun esta muy triste por la perdida de Gabrielle
Joxer: ¿qué es lo que piensas hacer?
Xena: Viajé a la tierra amazona de los muertos para reencontrarme con Gabrielle pero creí que sería mejor dejarla descansar, ahí descubrí que esta viva, tuve una visión, a veces escucho su voz sé que me necesita.
Joxer: No crees que ya es tiempo de que abandones su búsqueda, podría estar en cualquier lado tal vez muy lejos de aquí
Xena: Eso nunca sé que la encontrare, sabe que yo nunca me rindo ¿no piensas ayudarme? Esta bien iré sola, pero te juro que regresare con Gabrielle.
Joxer ve a Xena tan segura de lo que dice que no se atreve a contradecirla y decide continuar su camino.
En el atardecer Xena llega a una pequeña aldea y compra provisiones para continuar su viaje, casi anochece y hay que buscar un lugar para dormir, entra en un pequeño bosque y empieza a preparar la fogata al mismo tiempo recuerda a la pequeña bardo y su comida tal vez no era un manjar pero era muy buena haciéndolo, Gabrielle me haces tanta falta el silencio esta matándome me parece mentira que en esta noche no escuchare tu voz desearia oír alguna de tus historias mirar el brillo de tus ojos y esa dulce sonrisa que siempre me daba animo ¡oh dioses! Siempre estarás en mi memoria con estos pensamientos se queda dormida y pronto comienza a soñar, las noches acercan a su bardo. Xena duerme tranquila pero no sabe la aventura que le espera al amanecer.
Era una hermosa mañana el sol brillaba como nunca, Xena cabalgaba y sus cabellos volaban con el viento en el trayecto diviso un templo sobre una colina, no le importaban los dioses pero en esta ocasión necesitaba su ayuda y no se la pediría a Ares, tal vez Afrodita. Entro al templo y empezó a demandar una respuesta en ese momento apareció Afrodita
Afrodita: ¿Cómo estas?¿Y Gabrielle?
Xena: Por ella estoy aquí quiero que me ayudes a encontrarla
Afrodita: Te ayudare pero hay una condición
Xena: ¿Cuál?
Afrodita: ¿Estas realmente preparada para hacerlo? no quiero alarmarte pero es una misión muy difícil
Xena: Sí, estoy dispuesta con tal de recuperarla
Afrodita: Pues así será, con esto saldaras tu deuda conmigo
Xena: Esta bien, ¿qué es lo tengo que hacer?
Afrodita: Tendrás que traerme algo que es muy valioso, pero antes de continuar quiero advertirte otra cosa sí fallas en tu misión jamás volverás a ver a Gabrielle, ¿aun así quieres cerrar el trato?
Xena: Sí, estoy consciente del peligro
Afrodita: Tendrás que ir al sur ahí encontraras una montaña tienes que escalarla el camino es muy peligroso al llegar a la cúspide verás un castillo esta protegido por un ejército entraras y hallaras un pasillo al final de este debes dar vuelta a la izquierda y entrar en la cuarta puerta ahí descubrirás una bóveda tendrás que quitarle al guardia una llave y un diamante, abrirás el sótano, allí esta una cofre de madera debes colocar el diamante en el orificio y se abrirá en su interior descubrirás una botella, no debes abrirla sólo tráemela
Xena: Eso es todo
Afrodita: Sí, no es tan simple como crees sí pudiera hacerlo no necesitaría tu ayuda sólo un mortal puede sacar la botella de su prisión, Zeus la resguardó para que no cayera en manos malignas, solo un humano puede encontrar el lugar y la necesito
Xena: Esta bien, pero que contiene
Afrodita: Únicamente puedes entrar al castillo de noche y tienes que salir antes de que amanezca porque sí no lo haces quedaras confinada ahí por toda la eternidad. Es una botella de inmortalidad y sabes que es lo que pasaría si cae en manos perversas. Bueno te veré mañana, suerte.
Xena: Ahora tengo que ir al sur, Gabrielle resiste pronto estaremos juntas.
El calor aumenta en el transcurso del día y Xena hace una pequeña pausa para comer y descansar un poco al reanudar su camino vislumbro la montaña unos cuantos metros y estaría enfrente de ella al mismo tiempo Gabrielle despierta en una pequeña habitación y no encuentra a ninguna persona alrededor, solo recuerda como caía con Hope al fuego, no sabe quien la ha estado cuidando, de repente se dibuja una sombra en el umbral de la puerta parece una anciana Gabrielle se dispone a hablar pero la anciana rompe el silencio
Al fin despertaste, creí que ibas a morir
Gabrielle: ¿Quién es usted? ¿Y como me encontró?
Me llamo Arsinoe te hallé cerca de un río, estabas inconsciente y tu cuerpo era frío como un hielo, todas las noches gritabas Xena, ¿es alguien de tu familia?
Gabrielle: No, es mi mejor amiga ¿en donde estamos?
Arsinoe: Tú estas muy lejos de tu hogar
Gabrielle: Necesito marcharme
Arsinoe: ¿Vas a buscar a tu amiga? me temo que esto no será posible
Gabrielle: ¿ Porqué?
Arsione: Nadie puede salir, esto es muy diferente a lo que conocías
Gabrielle: explícate no te entiendo
Arsinoe: Todo lo que ves se te hace muy familiar, la gente, la naturaleza pero no estas en la tierra que conocías y no hay forma de salir, este es un mundo paralelo al tuyo y quien llega aquí es porque posee una culpa muy grande o un dios lo maldijo, es un universo espiritual no entiendo porque tú estas aquí, tú no estas muerta y no creo que hayas provocado la ira de un dios, pero cuéntame como llegaste aquí
Gabrielle: Xena y yo teníamos que detener el renacimiento de Hope la hija de Dahak si no lo hacíamos el mundo quedaría condenado para siempre, pero le debía un favor a Ares y llego el momento de pagárselo sí Xena mataba a Hope Xena moría y eso no lo soportaría, Hope y yo caímos al fuego y después no recuerdo nada
Arsinoe: Quieres demasiado a tu amiga que elegiste morir por ella, pero este es un sacrificio muy grande y Xena sabia porque lo hiciste
Gabrielle: Ella sabe que es la persona más importante en mi vida y creo que entiende lo que hice
Arsinoe: Por lo que me has dicho ella haría lo mismo por ti, podría jurar que esta buscando la manera de encontrarte, posiblemente hay una forma de salir pero eso no depende de ti, vendré a verte después.
La anciana sale de la habitación y Gabrielle suspira aquella mujer le ha dado una esperanza, ahora solo tiene que esperar a la princesa guerrera, Xena date prisa.
Gabrielle intenta interpretar las palabras de la anciana, pero sí yo no estoy muerta Hope tampoco eso quiere decir que regresará tal vez Dahak quiere ganar tiempo, pero esto no es posible, Xena ya lo sabrá, si mis especulaciones son ciertas por ahora no hará nada.
Xena llega a la montaña y emprende la subida casi cae el ocaso, tiene que darse prisa y el clima está en su contra pronto comienza a llover y esto hace más peligroso el ascenso un paso en falso y puede perder la vida, ha llegado a la cúspide ahora a patear traseros, todo está en una calma relativa la noche a caído y la lluvia ha cedido los relámpagos iluminan el camino la guerrera solitaria se acerca a la puerta del enorme castillo empuñando su espada patea la puerta y ningún soldado sale a su encuentro sólo hay esqueletos y cráneos su sagacidad le indica que algo o alguien se mueve detrás al voltear ve como los esqueletos se incorporan sujetando sus armas alguna vez fueron soldados y por su ambición quedaron presos para ser guardianes eternos, Xena inicia la pelea con su habitual grito de batalla destrozando los cráneos y huesos de sus oponentes pero son demasiados y sí esto continua nunca logrará su cometido lanza su Chakram y enseguida salta para sobrepasar a sus adversarios toma su arma y cruza el puente está dentro del castillo ahora camina por el pasillo y al dar la vuelta se encuentra con Gabrielle
Xena: ¿pero que haces aquí?
La rubia solo ve a su compañera fijamente y pregunta ¿acaso no te da gusto verme?
Xena: Por supuesto, Xena intenta abrazarla pero la bardo se quita ¿qué es lo que te pasa?
Gabrielle: Es lo mismo que te pregunto, salgamos no perdamos el tiempo, ¿qué es lo que buscas? sí me haz encontrado, vamos
Xena: No, tú no eres Gabrielle eres una ilusión, te pareces pero ella nunca me pediría esto, ella jamás le ha tenido miedo a nada
Esta bien creo que lo descubriste pero no pasarás de aquí yo soy Dánac el guardián de la puerta mi ambición me condeno pero conseguí un gran poder, Dahak me ordeno cuidar esta puerta hasta que uno de sus seguidores venga por la botella de inmortalidad
Xena: Deja de hablar y muéstrame lo que puedes hacer
Dánac: Lo siento primero tendrás que derrotar a mis amigas, Dánac se desvanece y enseguida surgen dos arpías, Xena toma una antorcha con la que consigue encender las alas de su primer atacante la antorcha se ha apagado y hay una oscuridad inmensa pero los relámpagos iluminan el pasillo la arpía se acerca lentamente por detrás golpea la espalda de Xena ahora va ha embestirla pero la hábil mujer desenvaina su espada gira y cercena la cabeza, se dirige a la cuarta puerta mientras anuncia su presencia, ahora sí Dánac a llegado tu hora
Dánac: Con gusto, en su mano aparece una espada de fuego ten cuidado si la tocas te puedes calcinar Xena: Yo te recomendaría que no confiaras tanto en una simple arma
Sus miradas se entrelazan y es Dánac quien comienza a atacar la guerrera detiene su embestida veo que eres bueno, lo mismo digo disfrutare viendo tu muerte, no estés tan seguro, Xena golpea la cara de su adversario y con una patada lo deja tendido en el suelo Dánac se incorpora rápidamente y golpea el abdomen de la princesa guerrera que se dobla por la fuerza del golpe, ahora es mi turno, patea el rostro de Xena y enseguida la toma por los cabellos y la levanta entonces con un dedo limpia la sangre que ha salido de la nariz de su oponente y con un gesto de arrogancia lame su dedo suelta los cabellos y la golpea con la empuñadura de su espada ahora se decide a dar el golpe final pero Xena piensa en Gabrielle y recupera sus fuerzas con una patada al rostro hace que Dánac se desequilibre y con un golpe en su mano derecha logra que suelte su espada ¿que te pasa? te sientes indefenso porque tu linda espada no esta contigo tu madre no te enseño que las armas son peligrosas y que el fuego es más peligroso, lo siento no tengo tiempo para jugar contigo espero que Hades te de la bienvenida en Tártaro dicho esto la morena destruyo a Dánac con su propia espada, él grito al sentir el contacto de la flama quemándolo y en unos segundos sólo era cenizas, Xena tomó la llave y el diamante, abrió la puerta y coloco el diamante en su lugar, en el interior del cofre se encontraba una pequeña botella, ahora tengo que salir de aquí casi amanece. Estaba a punto de cruzar el puente cuando el castillo empezó a desvanecerse y Xena corrió hasta llegar al final del puente en aquel momento Afrodita apareció
Xena: Toma esto te pertenece y ¿donde esta Gabrielle?
Afrodita: Sabia que lo lograrías, gracias Xena, espera un poco no tardare, Xena aunque Gabrielle regrese tendrán que enfrentar más peligros, Hope regresará, bueno ahora sí es hora de que cumpla mi parte.
Xena: Lo sé
Afrodita se presentó frente a Gabrielle
Gabrielle: ¿qué es lo que haces aquí Afrodita?
Afrodita: vengo por ti, Xena me hizo un favor y voy a llevarte a su lado así cumpliré mi parte del trato
Gabrielle: Pero antes quiero hacer algo
Afrodita: Esta bien
Gabrielle: Arsione, Arsione
Arsinoe: Aquí estoy ¿qué es lo que pasa?
Gabrielle: Vengo a despedirme, tengo que agradecerte todo lo que hiciste por mi, no se como pagártelo
Arsinoe: No te preocupes, tu también me enseñaste muchas cosas, el valor de la amistad y el sacrificio, ahora se que es lo que vio Xena en ti, cuídate.
Gracias, después de esto Gabrielle regresa con Afrodita.
Llegan a un enorme jardín, con una amplia variedad de flores las más hermosas que se puedan imaginar
Afrodita: es hora de irme y enseguida se desvanece
Gabrielle: ¿pero donde esta Xena? La bardo empieza a abarcar con su mirada el panorama es un hermoso amanecer las flores matizan su hermosura y a lo lejos se delinea un cuerpo mirando al sol, el corazón de Gabrielle late con fuerza y se siente inmensamente feliz de pronto la silueta voltea lentamente aunque el sol deslumbra a la bardo conoce a esa figura perfectamente y comienza a caminar pero luego corre y se aferra a ese cuerpo con todas sus fuerzas Xena hace lo mismo y unas lágrimas ruedan por sus mejillas, sin pronunciar palabra se miran fijamente quieren guardar este momento en sus memorias para siempre, el color azul de los ojos de Xena recupera su brillo y Gabrielle tiene esa maravillosa sonrisa que hechiza a la morena, la guerrera es la primera en hablar
Xena: Mírame a los ojos y prométeme que siempre estaremos juntas, nada nos separara ni la muerte
Gabrielle: te lo prometo, sabes que te amo Xena
La morena siente que su corazón arde al tener a Gabrielle en sus brazos, respira profundamente y se pierde en la mirada de la bardo
Xena: Te amo Gabrielle eres lo mejor que ha pasado en mi vida, tú eres mi camino
Y con este cálido abrazo y un maravilloso paisaje Xena y Gabrielle descubren la gran amistad que comparten y disfrutan.
FIN
