Este es un pequeño apunte sobre
canto gregoriano, sin querer ser un artículo para entendidos en la materia, puede
ser una guía somera de algunos aspectos de esta expresión artística. Y esta es la
primera controversia , no debe (en su más puro ser) ser una expresión artística, sino
una forma de comunicarle al Señor nuestras más íntimas ansias, súplicas, alabanzas.
Dado el carácter actual de esta forma de expresión artística, podemos historiar un poco para situar sus orígenes. Desde las primeras épocas del cristianismo se interpretaban cánticos provenientes de la liturgia Judaica; al extenderse el cristianismo por el mundo, en cada zona geográfica se comenzaron a interpretar las canciones litúrgicas de diferente forma . El Papa San Gregorio Magno (540 - 604) unificó la forma de los cantos litúrgicos con un equipo de «liturgistas» fijando los himnos del «canto romano»; con el transcurrir del tiempo esta forma litúrgica fue entrando en desuso, y en diferentes épocas ha tenido lugares donde fue sostenida e impulsada: Escuela Saint Gall, Metz de Reichenau, ya en el siglo XIX resurge con la escuela del monasterio francés de San Pedro de Solesmes, más tardíamente en los monasterios españoles de Silos y Monserrat de la orden benedictina. Dada por terminada esta brevísima reseña histórica pasemos a ver que hacemos con esto. Podemos dar una definición que redondea muy bien su forma y contexto «Canto de género diatónico y ritmo libre que la iglesia ha adoptado para su liturgia» Debemos tener en cuenta que al ser una forma de orar es de importancia primordial la dicción y pronunciación (se debe entender a la perfección el texto). La pronunciación debe ser la correspondiente al Latín romano. Siempre la interpretación Gregoriana será unísono, jamás existirá armonía. No será necesario el acompañamiento de órgano.Se usará en esta música la escala diatónica o Pitagórica, que no procede por semitonos consecutivos. En forma primitiva la escritura Gregoriana se basaba en un "pentagrama" de una sola línea, la del texto y sobre él una serie de marcas que se llamaron neumas, las que daban idea de si la altura del sonido subía o bajaba; esto era realmente muy complicado. En la actualidad el Canto Gregoriano se escribe sobre un tetragrama (cuatro líneas y tres espacios) y se usan las claves de DO que puede ser en 2da, 3ra ó 4ta línea y clave de FA en tercera línea; Fa en segunda línea esta en desuso. Podemos decir también que todas las notas gregorianas tienen una duración igual entre sí, tanto si están solas o agrupadas; comparándola con la notación actual este tiempo valdría como una corchea, este tiempo es el "Tempus Primum et Indivisibile". Entre las figuras simples mostraremos algunas de las más importantes |
Las figuras adjuntas
son todas pertenecientes a la escritura reciente, y son las figuras básicas melódicas simples; todas ellas, como se ha dicho duran el tiempo de una corchea. Puede uno encontrarse con dosmodificadores de tiempo bastante comunes, el "Punctum Mora" ( . ) |
que se coloca al lado de la
figura en cuestión y, a diferencia del puntillo, que incrementa el tiempo en la mitad del
valor de la nota, éste la incrementa en el doble de su valor, existe también el
"Traversus Episema" (rayita horizontal) va colocado sobre una o más figuras
indicando un leve aumento en la duración del tiempo de esa nota o notas "muchas
veces significa un afecto del alma, mediante una pequeña prolongación del sonido".
Ni el punctum mora ni el traversum episema tienen funciones de modificadores del volumen
sonoro. Existen también figuras o neumas de dos notas, de tres y de cuatro y más notas, aquí colocaremos a modo de ejemplo sólo las más usuales de ellas
Existen otros símbolos gráficos muy frecuentes que podrían confundirse muy fácilmente con líneas de compás, estas son las Barras Divisorias. Estas barras tienen diferente longitud y son recursos que cortan la secuencia melódica y tienen mayor o menor importancia de acuerdo a su tamaño. De acuerdo al orden de aparición en el gráfico, vemos en primer lugar la barra mínima que separa incisos, la barra media separa miembros, la barra mayor separa frases y por último la barra doble separa períodos; existen dos más, una que no es una barra de separación sino que se llama Guión y se coloca al final de un tetragrama indicando donde estará la nota del siguiente tetragrama y la otra una pequeña rayita vertical sobre la nota o debajo de ella, el Ictus, que precisa el lugar donde está el apoyo del ritmo. |
También tenemos entre las
figuras una alteración que es el bemol, no es de práctica común que se use en la
armadura de clave pero se usa comúnmente como alteración accidental, no veremos en la
escritura gregoriana la alteración sostenido. En cuanto al ritmo, éste es libre, es decir que no encontraremos una sucesión continua de compases de igual duración (binarios o ternarios), libre se entiende como que cambiará aleatoriamente entre binario y ternario y esto va a depender del lugar donde esté colocado el ictus, en este ictus queda marcada la «tesis», parte baja de la posición de las manos del director en contraposición al «arsis», parte superior del movimiento de sus manos; aquí estamos haciendo referencia a la quironomía, que son las reglas del gesto para la dirección. Al revés de un movimiento preciso en cuanto a la división del tiempo en la música figurada y moderna, en el Gregoriano en cambio se dividen blandamente los ritmos siguiendo la línea melódica, con "agraciados" movimientos de mano. En la bibliografía que se adjunta se encontrará
riquísimo material que podrá mejorar la comprensión de las obras gregorianas, dado que
este pequeñisimo artículo sólo servirá para despertar sana curiosidad de un estilo de
música que fue de gran importancia durante muchos siglos. |
BIBLIOGRAFIA: | El
Canto Gregoriano, guía breve para su comprensión de Pablo Heras Alonso, editorial PS covarrubias 19 Madrid |
Manual de Canto
Gregoriano de Enrique Lombardi, División desarrollo musical de Casa América |