Después de que Gabrielle no aceptó la propuesta de Xena de vivir en la cabaña con
las niñas, como una familia normal y no en la aldea con el tratamiento de la familia
de la reina.
Xena se sentó a los pies de la cama, desencajada!!!! Su mundo tanto actual como
futuro acaba de desaparecer...
X: Puedo saber por qué?? (conteniendo las lágrimas) Solo se que me amas y yo
te amo. Lo hemos demostrado plenamente. Pero ya no quieres vivir conmigo?
G: Ah. Mi amor, sabía que lo ibas a tomar así de mal...
X: Ja y cómo quieres que lo tome?
G: Déjame explicarte.
X: Cómo vas a hacer para explicarme como es que me deseas y me amas pero que
ya no soportas compartir tu vida conmigo?
G: No, no es eso y tu lo sabes...
X: Entonces???
Gabrielle tomó asiento en la cama, al lado de su amor y levantó la mano para tomar
la mano de su mujer, pero Xena la sacó bruscamente.
G: Tranquila vida, escúchame... en estos meses las cosas han cambiado
muchísimo. La Nación Amazona puede desaparecer. La situación de paz con los romanos
se esta volviendo muy precaria, día a día.
X: No pongas excusas estúpidas. El encargado romano en esta parte es Livio
Aurelius. Y es un auténtico idiota. Le encanta venir a los banquetes que tan
sabiamente ofreces, para ver a todas las bellas chicas paseándose a su alrededor y
disfrutar de nuestra hospitalidad. No tiene porque querer romper relaciones...
Gabrielle puso un dedo en los labios de Xena para que no siguiera hablando. Y le
tomó la mano y la besó con dulzura.
G: Me dejas continuar?, por favor.
Xena asintió.
G: Hace 3 meses que Livio Aurelius un diplomático de pésima calidad fue
reemplazado por Crasso Tito uno de los generales mas prestigiosos y sanguinarios de
todo el Imperio. Eso qué te dice?
Xena abrió sus hermosos ojos de tal forma que volvió a ser la fría guerrera que
Gabrielle conoció.
X: Mis sentidos me dicen que se avecinan muchos problemas!!!!
G: Y vivir aquí nos dejaría muy vulnerables ante ellos. Podrían enterarse de
nuestra nueva casa y así estaríamos en peligro y a merced de ellos sin protección.
No puedo aceptarlo.
Xena quedó callada y pensativa. La razón de Gabby tenia lógica pero cuánto le dolía.
La cabeza le daba la razón pero su corazón, si su corazón no dejaba de dolerle.
X: Y qué piensas hacer? Qué dicen las consejeras?
G: Estamos siendo mas que precavidas. Ya lo hemos invitado a 2 banquetes de
bienvenida y no ha venido a ninguno. Después de la segunda invitación rechazada,
ordené a Andras que duplicara las horas de entrenamiento. Y que todas las prácticas
sean en la otra parte del valle. Por eso tu tampoco te diste cuenta!!! Jejeje Y allí
me convencí de que el plan funcionaría!!!! Se te había escapado hasta a ti!!!!
Y diciendo esto, la besó antes de que Xena pudiera sacar el fuego de palabras que
quería decirle a Gabrielle.
Xena estaba entre furiosa y orgullosa de Gabrielle, si bien le había ocultado todo
esto, era muy inteligente y sabia. Sencillamente la mujer de su vida. Su amor.
Cuando terminaron de besarse... Gabrielle continuó:
G: Además, Andras esta muy rara, es como si no fuera ella. Esta mas
despiadada, exigente e iracunda.
Fue en ese momento que Xena intuyó el por qué del cambio de comportamiento de Andras.
Andras había aparecido hacia unos 3 años en la villa. Muy mal herida fue encontrada
al norte de las tierras amazonas, se notaba que había caminado y arrastrado por días.
Nadie sabia como había podido llegar en esas condiciones tan deplorables. Era
evidente que la habían golpeado salvajemente. Y tenía una profunda herida en un
muslo que hacia que casi no la dejara caminar y perder mucha sangre.
Ahora Andras era la jefa del Ejército Amazona. Lo había logrado a base de retos a
las antiguas guerreras mas experimentadas. Era menor que Gabrielle unos 5 veranos.
Físicamente era muy parecida a Xena. Alta, delgada, fuerte, ágil, atlética. Tez
bronceada por el sol, cabello largo y negro, que dejaba al viento y ojos negros y
profundos como la misma noche sin luna. Eso la hacia misteriosa. Sus ojos eran como
espejos fríos venidos desde el mismo reino de Hades. Su especialidad era la lucha
cuerpo a cuerpo. Luchando se convertía en una pantera sigilosa y ávida de sangre.
Como si su vida dependiera de ello, aunque no se tratara de retos a muerte, ya que
Gabrielle los había prohibido terminantemente.
Ella no hablaba absolutamente nada de su pasado, si Eva venía a la aldea de visita,
se las arreglaban para charlar por horas. Eso era raro en Eva pero no decía
absolutamente nada de cómo la había conocido. El invierno anterior un mercader que
venía a intercambiar mercancías a la tribu la reconoció como Andras la Gladiadora
invencible del imperio, que había escapado y dejado en vergüenza a la legión romana
que la cuidaba. Era de Britania una picta que desde niña fue entrenada para matar.
Entonces todo comenzó a encajar. Era tan buena luchadora como producto de su
entrenamiento como gladiadora romana. La mejor de su época hasta que huyó en busca
de la tierra amazona donde había escuchado que las mujeres guerreras podían vivir en
completa libertad y luchar por el bien común. Y sobre todo ahora que tenían a la
Reina Gabrielle.
Cuando Xena le preguntó a Eva si esto era verdad, Eva se limitó a decir:
"Madre, Roma para mi ha quedado en el pasado, por favor permite que también quede
para Andras." Y Xena nunca mas habló o preguntó sobre esto.
Andras en cuanto vio a Gabrielle la primera vez, quedo fascinada por ella
visiblemente. Fue subiendo de rango y consiguiendo estar en una posición muy
cercana. Toda la tribu sabia que odiaba a Xena con todo su corazón. Xena tenía
incondicionalmente el corazón de su Reina. Pero Andras seguía intentándolo.
Cuando Xena no estaba se ocupaba personalmente del entrenamiento de las Princesas y
así poder estar mas cerca de Gabrielle. Xena la despreciaba y la celaba
terriblemente. Era descarada la manera que Andras provocaba a Xena por Gabrielle.
Es mas, toda la tribu se alegraba de que Gabrielle prohibiera los retos a muerte
porque ya se habrían retado y Andras contaba con bastantes menos años que Xena.
Aunque Xena, con mas experiencia y picardía.
Xena la ignoraba pero no por eso dejaba de vigilarla muy de cerca.
Todo esto hacía que no hubiera ocasión en la que pudieran convivir en paz, ya sea en
una reunión como cuando se cruzaban por la aldea.
Y sabía por las niñas que cuando se ausentaba estaban casi siempre con Andras. Y
para Xena era fuente de furia que instruyera a sus hijas.
Xena estaba perdida es estos pensamientos cuando escuchó la voz ronroneante de Gab
hablándole:
G: Ven conmigo a la cama, hace frío y quiero estar un rato mas contigo antes
de que llegue la guardia.
Y dicho esto las dos se metieron en la cama bajo las pieles, acurrucadas una en la
otra y prodigándose toda clase de caricias tiernas. Hasta que Gabby preguntó:
G: Bueno, ahora qué harás? Te iras?
Y mientras lo decía su voz se quebró.
X: No lo se, solo se que tengo que pensar en muchas cosas, pero cuando lo
sepa, tu serás la siguiente en saberlo. Como siempre mi amor!!!!
Y mientras se besaban, tocaron a la puerta, y era la guardia real que venía por
Gabrielle. Había llegado siguiendo su rastro.
Mientras que Gabrielle estaba todavía en sus brazos le susurró al oído:
X: He tomado una decisión: NO TE DEJARÉ!!! Y díselo...
Gabrielle se levantó, se vistió, tomó sus cosas y tomó la mano de Xena y la llevó
hasta ella para despedirse.
Le dio un beso tierno, lleno de amor. Y preguntó:
G: Cuándo te volveré a ver?
X: Mucho mas pronto de lo que piensas. Las niñas estarán en la aldea mañana?
G: Si mi amor.
X: Entonces allí estaré. Ahora no se dónde podré pasar la noche? Tu que dices?
Habrá una cama en la tienda de viajeros...
Pero no pudo terminar la frase, Gabrielle le estaba partiendo la boca de un beso,
apasionado y muy, muy demostrativo. Cuando se separó de ella le dijo:
G: Esa fue una invitación especial a la cama de la Reina!!!! La aceptas?
X: Bueno si el hospedaje es allí, la habitación de la Reina es muy
confortable y con baño termal y tod...
Y no pudo terminar de hablar por el codazo que acababa de recibir en las costillas
de su amada
X: Upsssssss. Bueno amor, no te alteres. Lo que mas me gusta de la alcoba
real es que allí duermes tu!!!
Besándola.
Gabrielle salió y subió a su caballo. Saludo a Andras y a las amazonas y giró para
decirle a Xena.
G: Entonces te espero...
Y salió al galope rumbo a la Aldea.
*****
Gabrielle de pronto volvió al presente, que tiempos aquellos... Sus labios
reflejaban una sonrisa, con un tinte de nostalgia.
Tomó la mano de Xena y le dijo:
G: Estoy recordando el tiempo en que Crasso Tito vino a esta parte del mundo.
Que época mas dura para nosotras!!!
Y con esto entrelazaron mas fuerte aun sus dedos y Gabrielle volvió a sumergirse en
sus recuerdos!!!!!
*****
Xena entró a la cabaña, tomó un baño, desayunó sonriendo por lo feliz que era al
lado de Gabrielle. A media mañana decidió ir en busca de Zyone, la curandera de la
tribu, al otro lado del bosque. Desde que había salvado la vida de Gabrielle y Gaia
en ese parto tan malo, Xena mantenía una relación bastante cercana con la mujer de
avanzada edad. Primero fue de inmenso agradecimiento por ser una sanadora tan buena
que salvó a su esposa e hija. Pero luego, Xena comenzó a confiar en ella y ella en
Xena. Contaban con el mismo tipo de carácter, sombrío e intrigante. En Zyone era
fruto de su sufrimiento y pesar. Zyone había contado con una familia, esposo, hijo
e hija y 2 nietitas de su hija. Era una familia feliz y hermosa hasta que llego Un
Señor de la Guerra con su ejército devastando el pueblo. Fue un ataque por sorpresa
una tarde en la que Zyone estaba buscando hierbas curativas al otro lado del bosque.
Cuando escuchó ruidos que no sabía a que se debían volvió para el pueblo y solo
encontró fuego y destrucción. No quedaba nada en pie y no habían dejado
sobrevivientes. Solo ella.
Tardo días en recuperarse y emprendió la marcha por el camino sin saber a donde ir.
Hasta que una caravana de amazonas que fueron a Atenas a vender sus mercancías la
encontró. Estaba en muy mal estado pero la llevaron a la aldea y allí se quedó
desde hacia mas de 15 años. Se había convertido en una anciana dulce y muy sabia.
Y eso era lo que Xena mas valoraba en ella, su tranquilidad para pensar en todas
las alternativas a tener en cuenta antes de tomar una decisión. Y por esto era
miembro del Alto Consejo de las Amazonas.
Xena fue a verla y llevó un odre de vino del bueno para ponerse a "charlar a gusto"
y sin que se les secara la garganta. Le contó como había sido rechazada su propuesta
y que estaba completamente desorientada en que debía hacer.
Z: Y tu qué harías para ayudar a Gabrielle en estos momentos?
X: Muchas cosas, asegurarme que las decisiones de defensa son buenas y por
sobre todo mirar por el entrenamiento de sus guerreras. Eso en un combate será
definitorio.
Z: Yo que tu en eso descansaría. Tiene a la mejor entrenando al resto. Y por
lo que vi Andras hace un excelente trabajo. La guardia real es lo mejor que tenemos.
No se les escapa nada.
Xena al escuchar esto, entrecerró los ojos y en ellos se dejó traslucir su furia
que sumada al vino se hacia intolerable. Fue entonces cuando dijo:
X: Para mañana tu opinión habrá cambiado. Y diciendo esto, saludo a su vieja
amiga y salió de la cabaña hecha un torbellino.
Xena sabía que camino tomaría la guardia real con sus hijas las princesas herederas
del trono de Gabrielle, de vuelta a casa.
Espero en donde supuso que iban a acampar ya que el viaje era bastante pesado para
las pequeñas y una vez que todo el campamento estuvo en silencio. Sigilosamente lo
atravesó y subió a la litera donde estaban sus hijas. Comenzó despertando a Alma,
con caricias en su carita y suaves besitos. En el instante que la niña abrió los
ojitos tapó su boquita y le dijo al oído "soy mamá y te vengo a buscar para jugar".
A Alma le brillaron los ojitos de emoción, ver a su madre y además jugar con ella!!!! Era mejor que estar soñando. El juego es salir del campamento sin que las guardias nos vean, susurro en el oído de la niña. Y la niña asintió.
Xena tomó a Gaia y la pusó recostada en su hombro ya que estaba profundamente
dormida y a Alma la alzó en su otro brazo y tan sigilosamente como había llegado se
fue.
Caminó un largo trecho a través del bosque sin hacer ruido hasta llegar a Argo, que
estaba esperándola lo suficientemente lejos del campamento.
Puso a Almita en la parte delantera de la silla, sosteniéndola mientras que ella
subía y salía con Argo tan calladamente como había llegado.
Ahora si que estaba feliz, tenía entre sus brazos a sus pequeñas. Cuánto las había
extrañado!!!!
Alma estaba recostada en su vientre y agarrada al brazo con el que sostenía la
rienda y Gaia se acomodó mejor en le hombro de su madre cuando comenzó el galope de
Argo.
X: Bueno mi amor (dirigiéndose a Alma) como lo has pasado en casa de tu
prima?
A: Bien mami, pero yo quería estar acá contigo y diciendo esto se abrazó mas
fuerte al brazo musculoso de su madre. Y mami Gab dónde esta?.
X: Ella vendrá mañana a nuestra nueva casa. Tengo una sorpresa para Uds.
En eso momento Gaia abrió sus ojos y pegó un grito de emoción al verse en brazos de
su madre y se colgó al cuello de tal forma que casi la ahoga. Le dio un sonoro beso
y sonreía nerviosa y encantada a la vez.
G: Hola mami y mami Gab dónde esta?
X: Le estaba diciendo a tu hermana justamente que mañana la veremos en
nuestra nueva casa, porque tengo una sorpresa para Uds.
Dicho esto llegaron a un pequeño campamento en un claro donde había preparadas dos
camitas pequeñas y una grande, pegadas entre si, para que pudieran dormir juntitas.
Xena desensilló a Argo, hizo una fogata para que les diera calor durante la noche y
se acostó con las niñas!!!!
Las tres se abrazaron y se quedaron dormidas riendo, contándose anécdotas y mirando
las estrellas que brillaban con mucha intensidad.
Cuando la jefa de la guardia real despertó no encontró a las niñas, las que hicieron
la guardia no habían escuchado nada. Pero las niñas no estaban. Solo había un sobre
cerrado con el sello de Xena y una rosa.
Dirigido a la Reina Gabrielle.
Continuará...