Disclaimer: Los personajes nombrados (Xena, Gabrielle, Joxer, Ephiny, etc) no son de mi propiedad, sino de Robert Tapert y sus guionistas de la gran serie Xena: Warrior Princess.
Advertencia: En esta historia se habla del amor entre dos mujeres, si no te agrada o eres menor de edad, por favor, hay otros FF más interesantes que éste, los cuales puedes leer.
Consulta: Si necesitas consejo de un Bardo o simplemente felicitarme por los FF'S, aquí tienes mis correos. lobeznadlbosque@yahoo.es y lobeznadelbosque@hotmail.com
Agradecimiento: Pues como siempre o si no lo he dicho aún, pues a esta pagina por darme la oportunidad de publicar mis historias, a tod@s l@s lector@s, que dedican su tiempo en leer. A la Musa que ha vuelto para echarme una mano en mis inspiraciones y sobre todo a mis nuevas Bardos, que digamos que se han vuelto mis protegidas, Iskaliz y Ankerry. Un Xenabrazo para todo el Xenaverso.
Ahuuuuuuuu bye bye bye bye bye bye.


PENSAMIENTOS Y AMOR

Por Lobezna del Bosque

Cuarta parte

En la cabaña real Gabrielle había llorado, caminaba indecisa de sentarse o ir detrás de la guerrera para gritarla unas cuantas cosas, pues como era capaz de pensar mal de ella, si solamente tuviera una señal que Xena siente algo por ella, o algún interés por las mujeres, ella la trataría de conquistar poco a poco, de repente se tenso, sintió un gran escalofrío por la espalda, como si alguien la observara con curiosidad, era una presencia de una guerrera, quería darse la vuelta y encontrarse a Xena, pero a ésta la escuchó afuera, hablando con una preocupada Ephiny, que trataba de buscar a Troy y le pedía a su amiga ayuda, la Guerrera parecía molesta, pero Gabrielle no sabía bien, si por que la molestara en su camino hacia la cabaña para hablar con ella o por que aún seguía molesta por su conversación, al final escuchó como Xena aceptó a ayudar a su amiga para buscar a Troy, parecía que ambas se habían alejado, pues hubo un gran silencio.

---------Gabrielle---------
Ojalá, yo tuviera esa mano como Ephiny con Xena, hacer con ella todo lo que quisiera, ojalá llegara y me agarrase por la cintura y me besara el cuello, pero no antes de decirme...

- Te amo....

Gabrielle había tenido los ojos cerrados todo el tiempo, mientras sus ojos iban divagando libres, sintió unas manos sobre su cintura, también sintió un beso en su cuello, las palabras que había escuchado fueron como un susurro tierno y pausado, anhelaba esas palabras, las deseaba con todo su corazón, se dio la vuelta lentamente, pero sin abrir los ojos, quería saber que se trataba de su guerrera, cuando abrió los ojos se llevó una gran sorpresa, pues delante suya había una persona que no era Xena, vestía mejor que una Amazona y llevaba a su espalda un arco de plata, la sonreía dulcemente, pero cambió al recibir un gran bofetón de parte de Gabrielle, pero justo cuando Artemisa quiso explicarse ya tenía el filo de una espada en su cuello, seguido de un gruñido de enfado, Gabrielle siguió el filo hasta encontrarse con unos ojos azules como el acero, que apenas la quería mirar. La diosa estaba apartada por su intento de consolar a Gabrielle, conocía bien a Xena y era capaz de cualquier cosa por su bardo y más cuando ésta estaba en apuros, pero ese no era el caso, la guerrera había visto todo y justo se iba a marchar, pero cuando vio la reacción de su Bardo sabía bien que algo no andaba bien, pero en realidad y unas diosas sabían, es que le hervía la sangre, dando rienda suelta a sus pensamientos.

--------Xena---------
¿Pero qué pasa aquí, a quién esperabas Gabrielle?, según tu reacción a Artemisa no esperabas, pero entonces a quien, lo que está claro es que prefiero verte con Joxer antes que con una diosa, que puede hacerte mucho daño. Además me tengo que ir a ayudar a Ephiny a buscar a Troy, parecía preocupada, se ve que se a enamorado a simple vista, ojalá eso me ocurriese a mi. ¿Pero Gabrielle, quien creía que era la persona que tenia detrás de ella?, esto me esta matando, Gabrielle por favor.

---------Gabrielle---------
¿¿¿Pero qué ha pasado aquí???, ¿por qué Artemisa me ha hecho lo que he pensado?, y encima el comportamiento de Xena, ¡bueno, vale!, eso esta bien, juraría que en sus ojos hay odio y celos, pero ella siempre te protege Gabby y al ver que la has abofeteado pues sus impulsos de guerrera y protectora han actuado, ¡¡¡por favor Xena, dime que me amas y que has tenido celos!!!

- Xena puedes bajar el arma.-dijo a duras penas Artemisa.
- ¿Por qué has tratado a Gabrielle así?, nadie la toca.-la amenazó.
- ¿¿¿Salvo tú???.-dijo pícara Artemisa, recibiendo un gruñido por parte de la guerrera y a su vez un acercamiento más próximo de su espada en su garganta.- ¡¡¡vale!!!, solamente vine a relajar a Gabrielle por el día de hoy.
- ¡No cuela!, conozco muy bien a las diosas, a la mínima os aprovecháis de cualquier situación, sobre todo tú y tus amazonas. Y te notifico que Gabrielle no es así, así que si te apartas de ella posiblemente no sentirás el filo de mi espada.

Artemisa muy despacio dio un paso hacia atrás, Xena algo desconfiada retiro su espada, pero no la guardo, Gabrielle estaba algo sorprendida por lo que había contemplado, pero en el fondo tenia curiosidad por saber a que se refería Xena con ese comentario a las diosas y como no, como Artemisa había leído su pensamiento.

- ¿De qué va la fiesta?.-preguntó curiosa.
- Xena ya Ephiny nos explicó que es en honor a su diosa, aquí presente.-contestó Gabrielle.
- ¡Me alegro Gabrielle!, pero aquí algo me huele mal, hay una cosa que nadie nos explica, todas están calladas y yo quiero saber de que va la fiesta. Aunque halla estado en muchas ninguna ha tenido tanto interés.-su tono de voz era exigente y enfadado.
- Bien os explicaré, pero si la guerrera enfunda su espada.-la miró directa, Xena enfundó la espada y se cruzó de brazos.-Hoy es una fiesta en honor mío, es muy importante se celebra una vez al año y por lo general los preparativos no se deben escatimar.
- ¡¡¡Al grano!!!.-gritó Gabrielle impaciente.
- Vale, es un deber y obligación que la reina de la tribu...
- ¡¡¡Xena no la encuentro por ninguna parte!!!.-gritó desesperada Ephiny, interrumpiendo la conversación, cosa que dio gracias Artemisa.
- Calma Ephiny, ahora te ayudaré a encontrar a Troy, en cuanto la presente nos explique una cosa.-miró amenazante a Artemisa.
- ¿¿¿Troy, buscáis a Troy???.-saltó sorprendida.
- ¿La conoces, sabes dónde está?, por favor dímelo.-le decía preocupada Ephiny.
- ¡Mira!, olvídate de ella, no creo que vuelva, todo fue una confusión. Hizo una cosa mal con un cómplice y ahora ha vuelto a su casa.
- ¿Pero qué cosa ha hecho para castigarla y apartarla de mi?
- Troy no es quien parece ser.-le dijo molesta, sintiendo otra vez la espada de Xena en su garganta.
- Mi amiga te ha hecho una pregunta y tu la estas esquivando, porque me da a mi que sabes algo y no nos cuentas nada. A lo que me da a entender que lo que ha ocurrido en las últimas marcas de vela tienen relación con las diosas del Olimpo. ¡Por favor si me confundo me lo haces saber!.-tomó aire, pero no apartó la espada.-El cómplice de Troy es Cupido y lanzó una de sus flechas que casualmente le dio a Ephiny, por eso se comportó tan... amistosa conmigo. Según las leyes amazonas ninguna amazona se puede enamorar de una mujer que no lo sea y solamente la Princesa o la Regente pueden estar con una mujer que no sea amazona, ¿no?. Tu la castigaste trayéndola aquí, obligas a Cupido a deshacer su hechizo, pero de repente Troy tiene los mismo síntomas que Ephiny, pero de seguro que fue un error de calculo de Cupido, pues ésta se embobo por dos a la vez. Troy al acostarse con Ephiny de repente se marcha y tu dices que la castigaste, pero para mi que era la primera vez que estaba con una mujer y tu lo sabias, y aprovechaste el descuido para que Cupido le quitara el hechizo.
- Era muy pasional.-alegó Ephiny.
- Era demasiado entendida en el coqueteo, en la seducción, pasional, en general solo conozco a una persona o diosa con todas esas características, la divina Afrodita.
- ¿¿¿Qué.........???.-saltaron las tres a la vez, ante la deducción de la guerrera tan sutil.
- Es una locura.-saltó molesta Ephiny.
- ¿Pero cómo?.-saltó sorprendida Artemisa.
- ¿Cómo la conoces tanto?.-saltó molesta Gabrielle.
- Creo que te estas equivocando Gabrielle. ¡Artemisa empieza a hablar! , ¿por qué tanto juego tonto?
- Xena no creo que Gabrielle quiera escuchar algunas cosas.-la informó.
- Ya soy mayor para escuchar cualquier cosa, empieza a hablar porque estoy perdiendo la paciencia.-saltó desesperada Gabrielle, ardía de furia, no sabía si por celos o por odio.
- Xena puedo explicártelo todo en privado.-sonó suplicante.
- Si ella dice que puede escucharlo, pues empieza a hablar.-le ordenó Xena retirando su espada.
- ¡¡¡Ok!!!, todo ha sido una treta para que mi mejor Princesa amazona tuviera una campeona en condiciones, Troy es Afrodita, porque se le ha metido que había amor por esta villa y cometió un error.
- ¿Xena cómo puedes saber con tanto acierto como es Afrodita?.-preguntó curiosa Gabrielle.
- Verás Gabby hace mucho tiempo, cuando empezaba a ser guerrera me enamoré como una tonta, pero Ares me hizo ver que me engañaba como a todas sus amantes, sentí amor por una mujer y me destrozó el corazón.-la confesó dolida.-Afrodita trato de...
- ¿Ósea que fue el estúpido de Ares quien te hizo cambiar?.-apareció Atenea en la cabaña.
- ¡¡¡¿Fue ella?!!!.-más que pregunta era una acusación de la bardo.

------Gabrielle------
"Yo que pensaba que Xena no podría amar a ninguna mujer, ni siquiera a mí y ahora resulta que tiene tantos amantes por ambos lados. ¡Y ahora que se supone que voy a hacer yo!, podía competir contra Hércules o contra cualquiera, pero estamos hablando de una diosa, ¿quién compite contra eso?, ella le habrá dado más placer que ninguno, yo nunca la podré dar tanto"
-parecía que iba a llorar, pero su orgullo se lo contuvo, no quería darle ese gusto a la diosa, verla humillada o destrozada.

-------Xena------
"Gabrielle di algo, por favor, me estoy muriendo por saber que piensas sobre lo que te he confesado, moléstate, conténtate, abofetéame, ¡lo que sea!, pero has algo que me de a entender que sientes algo por mi. Nadie me importa salvo tú, eres mi luz, mi vida, te amo".

----------Ephiny----------
"Troy es Afrodita, ¡¡¡vaya!!!, he estado con la diosa del amor y no me he dado cuenta, aunque hay que decirlo, conmigo ha gritado más que con cualquiera, ¡pero qué digo!, de seguro ha tenido miles de amantes, yo debo de ser una mierda comparado con ellos. ¡¡¡Cómo puedo ponerme a la altura!!!, se habrá reído de mi a gusto. Soy una necia, ella no querrá verme, todo fue cosa de las flechas de Cupido, estaba hechizada y cuando le quitaron el hechizo se horrorizó. ¡¡¡Pero si gritó como una loca!!!, pero que digo, me estoy engañando sola, todo era fingido".

--------Atenea-----------
"¿Creo ver a Gabrielle contener las lágrimas?, sí, ósea que es cierto, la tonta rubia siente amor por mi guerrera y como actúa ésta de seguro que es mutuo, pero a Xena se la ve impaciente por saber lo que opina sobre lo nuestro, pero parece ser que la bardo es muy orgullosa. Aunque pensándolo bien, si Gabrielle no le confiesa lo que siente, puede que Xena vuelva a mi. ¡Eso rubia!, sigue siendo orgullosa no confieses nada, que la guerrera volverá a mi y esta vez no la voy a dejar escapar."

-----------Artemisa-----------
"¿Dónde esta la diosa del amor cuando se la necesita?, si es que ya decía Hera que lo mío es la caza y las amazonas, pero nada de amor, es un terreno peligroso, que solamente Afrodita conoce bien. ¿Alguien se ha dado cuenta que aún puedo leerles el pensamiento?, esto de tener momentaníamente los poderes de Afrodita me esta gustando, aunque no entiendo por que me esta entrando ganas de pegar a Xena, por el simple hecho que Atenea quiere tenerla para ella, esto ya me esta superando demasiado. ¡¡¡¡Afrodita aparece!!!, que arregle todo esto. Ephiny se siente mal y enamorada de ella, Xena y Gabrielle no confiesan lo que siente. Atenea quiere volver con la guerrera y yo quiero vomitar."

Nadie pronunciaba palabra, cada cual con su pensamiento, no dejaban de mirarse amenazadoras, sobre todo Artemisa y Xena, que parecía que se iban a matar en unos instantes, pero en el fondo nadie quería decir nada por si acaso se arrepentirían más tarde, solamente querían que la Diosa del Amor apareciera para que aclarase todo de una vez, porque al parecer ella tenia que ver en todo los casos.

Continuará...


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